Según Garis, la crisis en el sector no es nueva, pero ha alcanzado niveles alarmantes en los últimos meses. "Desde el 10 de diciembre nos han dejado en un lugar donde nos sacaron la conducción provincial, hicieron renunciar al coordinador provincial, al coordinador de Cuyo, e incluso al conductor nacional. Y no han nombrado a nadie para reemplazarlos", explicó Garis.

Esta falta de liderazgo y dirección clara ha llevado a la desorientación y el desamparo de los trabajadores, quienes se encuentran en una situación de limbo laboral. "Nos pasaron de un ministerio a otro, nos despidieron a más de 900 trabajadores sin previo aviso ni notificación, y ahora nos dicen que van a dejar solo una secretaría de 60 personas para todo el país. Es una falta de respeto y consideración hacia quienes dedicamos años de nuestra vida a este sector", expresó Garis visiblemente indignado.

Pero la problemática no se detiene allí. Garis también hizo hincapié en la importancia del trabajo de campo y la interacción directa con los productores. "Necesitamos vehículos, herramientas, y recursos para poder llegar a los lugares más remotos y brindar el apoyo necesario a los pequeños productores. Pero en la última década hemos visto una disminución drástica en la inversión y el mantenimiento de la infraestructura necesaria", señaló.

El impacto de estas decisiones gubernamentales no solo se refleja en la pérdida de empleos y la precarización laboral, sino también en el abandono de políticas que han demostrado ser efectivas para el desarrollo y la protección de la agricultura familiar. "Hemos acompañado a más de 2000 familias en todo este tiempo, trabajando en proyectos comunitarios, capacitaciones, y brindando apoyo directo a los pequeños productores. Pero todo eso se está desmoronando frente a nuestros ojos", lamentó Garis.

Ante esta situación, los trabajadores se encuentran organizándose y buscando respuestas tanto a nivel gremial como legal. "Estamos trabajando con los gremios para defender nuestros derechos y buscar una solución a esta crisis. Pero necesitamos una respuesta clara y definitiva por parte del gobierno. No podemos quedarnos en el limbo esperando que decidan nuestro destino", enfatizó Garis.

La incertidumbre y la preocupación continúan en el sector de Agricultura Familiar, donde cada día se evidencian más las consecuencias de políticas gubernamentales que parecen dejar de lado a quienes más lo necesitan. Mientras tanto, los trabajadores como Sergio Garis siguen luchando por mantener viva una labor fundamental para el desarrollo rural y la protección de las familias productoras en todo el país.

La entrevista completa, a continuación.