La condena fue por amenazas y privación ilegal de la libertad contra un hombre y una mujer en 2023. Al tratarse de una pena condicional, el músico no cumplirá su condena en la cárcel.
Durante la audiencia, el juez explicó que no se podía "investigar eternamente" y defendió la decisión, señalando que "es preferible absolver a un culpable que condenar a un inocente". En sus últimas palabras antes del veredicto, L-Gante se mostró molesto y afirmó: "Soy una persona inocente y estoy en esta sala de juicio porque no quise poner dinero". El cantante también expresó su enojo por haber llegado a juicio y haber pasado varias semanas detenido en la DDI de Quilmes.
El fallo ha generado reacciones encontradas, especialmente tras el pedido inicial de la fiscalía de siete años de prisión para el músico.