José Gianello, presidente de la Cámara de Expendedores de Combustibles de San Luis, señaló que en la provincia algunos comercios están recibiendo tan solo el 60 por ciento de la cantidad de combustible que solicitan. Esto ha llevado a que las estaciones de servicio adopten medidas para gestionar el suministro de nafta de manera más efectiva, como atender solo a sus clientes habituales.
La escasez de combustible se ha convertido en un problema extendido en todo el país, y las largas filas en las estaciones de servicio están afectando la disponibilidad de combustible en aquellas que aún cuentan con suministros. Gianello enfatizó que esta situación no ha tenido una solución inmediata, a pesar de las reuniones entre el Ministerio de Economía de la Nación y algunas petroleras.
En el comunicado de Cecha y otras asociaciones del sector se enfatiza que las estaciones de servicio no tienen control sobre la falta de suministro de combustible, ya que su función es poner a disposición de los clientes el volumen necesario en sus establecimientos. Los problemas en el abastecimiento se atribuyen a la diferencia de precios entre las distintas petroleras y las dificultades para importar hidrocarburos.
En busca de soluciones, la secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón, se reunió con las principales operadoras de combustibles del país. En el encuentro, se acordó la importación de diez barcos de combustible para normalizar el suministro y se estableció que las paradas técnicas en las refinerías se reducirán en los próximos diez días, lo que aumentará la capacidad de refinación en las principales instalaciones del país.
La situación de escasez de combustible es un desafío importante tanto para los consumidores como para los operadores de estaciones de servicio, y se espera que estas medidas contribuyan a aliviar la situación en las próximas semanas.