Desesperado pedido de ayuda: familias exigen asistencia urgente para sus hijos con adicciones
Madres y padres de San Luis alzan la voz ante la falta de respuestas del Estado para atender la problemática de las adicciones en jóvenes. Unas 50 personas se han unido en un pedido desesperado de asistencia urgente, asegurando que la situación es insostenible y que ya se han registrado al menos 14 suicidios de chicos en situaciones extremas. Buscan la creación de un espacio donde sus hijos puedan recibir ayuda inmediata, sin demoras burocráticas.
«Lo que queremos es un lugar donde los chicos vayan con contención, pero no a largo plazo. Hoy por hoy todo es burocracia, te dicen que la semana que viene tenés audiencia y así se va perdiendo tiempo. Recientemente falleció un chico del barrio Rawson, se suicidó por la problemática de la droga», contó una de las vecinas que integra el grupo «Los queremos vivos», quien prefirió mantener su identidad en reserva. Aunque no tiene hijos en situación de adicción, decidió sumarse a la lucha para ayudar a quienes atraviesan este drama.
Actualmente, la única intervención estatal proviene del Centro de Prevención y Asistencia a las Adicciones (CPAA), pero las familias aseguran que el apoyo es insuficiente. En muchos casos, los jóvenes se niegan a asistir y sus allegados no tienen asesoramiento sobre qué hacer. «Necesitamos que los jueces obliguen a estos chicos a ir», sostuvo la vecina.
San Luis no cuenta con espacios de internación para personas con problemas de adicciones. Si bien existen centros en provincias como Buenos Aires o Córdoba, la realidad económica de muchas familias imposibilita esa alternativa. «No tienen cómo mandar a sus hijos afuera, y aún si pudieran, no tienen cómo ir a visitarlos y hacer un seguimiento. La mayoría está en situación de pobreza, muchos no tienen trabajo», lamentó.
Conseguir asistencia psicológica tampoco es sencillo. «Hay muchísimos casos donde te dan un turno para un psicólogo de acá a tres meses y en ese tiempo tu hijo se deteriora más. Están desesperados por salvar a sus hijos. Es terrible la situación que tenemos en la provincia. El Gobernador dijo que en La Toma posiblemente iban a poner un centro de internación, no sé en qué año», agregó.
Ante la falta de respuestas, las familias evalúan realizar una marcha silenciosa con carteles para visibilizar la problemática y exigir medidas concretas. Insisten en la necesidad de contar con un espacio de contención que brinde asistencia inmediata y evite que los jóvenes sigan en la calle, expuestos a situaciones de riesgo.
«No hay acciones ni respuestas del Gobierno. Esto es ahora, mañana es tarde, mañana estás velando a tus hijos. Es moneda corriente ver a los chicos sin dormir, sin comer, tirados en la calle. Es una problemática grave. ¿Qué será de nuestros adolescentes el día de mañana?», reflexionó una de las integrantes del grupo.
El pedido es claro: contención psicológica urgente, un lugar donde los jóvenes puedan recibir asistencia y apoyo también para sus familias. «Los padres también están pasando por un problema psicológico terrible. Necesitan contención, la ayuda de saber cómo seguir, que no sea todo burocracia, que la ayuda sea inmediata», concluyeron.