La confirmación de que la administración pública provincial percibirá un incremento de solo el 15%, cuando la inflación acumulada en el último semestre ronda el 100%, ha sido vista como una medida cosmética e insuficiente para siquiera iniciar un sendero de recuperación del poder adquisitivo de los puntanos.
Además, las Becas 22 AG no fueron alcanzadas por la suba, lo que ha incrementado aún más el descontento. Los beneficiarios de Inclusión Social han criticado duramente al gobernador, acusándolo de condenarlos a un porcentaje aún menor, mientras que los estatales han expresado su indignación por la escala de haberes anunciada. Todo esto ha sido interpretado como una provocación innecesaria por parte del Gobierno Provincial.
El secretario adjunto de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Diego Costa, reiteró que el aumento es "insuficiente" y exigió una recomposición salarial acorde a la inflación. ATE también repudió la publicación de los salarios de los trabajadores estatales, calificándola como un "método de extorsión con intenciones maliciosas", que no refleja la realidad salarial y evidencia la gran cantidad de sueldos por debajo de la línea de pobreza.
En resumen, la decisión del gobernador Poggi de anunciar un aumento salarial del 15% ha generado una fuerte reacción negativa en las redes sociales y entre los distintos sectores afectados, poniendo de manifiesto la profunda insatisfacción y el sentimiento de haber sido utilizados y desatendidos en sus necesidades más básicas.