"Cuando Martín Palermo se retiró del fútbol en cancha de Boca, mi tristeza fue tan grande que ya nunca más volví a la Bombonera. Si ahora vuelve como DT, me da unas ganas locas de volver...", escribió en la red social X el futuro primer mandatario, que asumirá el mando el 10 de diciembre.
La reacción de Milei se produjo horas después del anuncio de Palermo, actual entrenador de Platense, acerca de la chance de volver a Boca si la oposición se impone en los comicios del club.
"Desde que empecé mi carrera como entrenador, siempre que me preguntaron cuáles eran mis sueños, dije que eran los de dirigir a Boca y Estudiantes. Hoy estoy con la posibilidad de que (Andrés) Ibarra me tenga en consideración y con la posibilidad de cumplir ese sueño. Si las cosas se dan, tengo la posibilidad de ser el técnico de Boca", reconoció el "Titán", tras la victoria ante Sarmiento en Vicente López.
Palermo, de 50 años, máximo goleador histórico del "Xeneize", se retiró como futbolista profesional en 2011 y a fines del año siguiente inició su etapa como entrenador, que incluyó pasos por Godoy Cruz de Mendoza, Arsenal, Unión Española de Chile, Pachuca de México, Curicó de Chile, Aldosivi de Mar del Plata y Platense.
Milei es un confeso hincha de Boca, aunque admitió que perdió su pasión cuando "el populismo se instaló en el club", una idea que relacionó con los retornos de exjugadores como Juan Román Riquelme -hoy vicepresidente segundo- y Fernando Gago.
"Era de Boca hasta que el señor Angelici lo trajo a Riquelme a robar. No era un poquito de Boca, era intensamente de Boca, tengo estrella en el museo y palco. Bastante tengo con vivir en un país populista para además ser hincha de un equipo populista. Y cuando lo repatriaron a Gago me hice anti. Cómo pueden traer a un cinco que no marque, Gago tiene menos marca que La Salada", dijo en una entrevista con radio Mitre antes de consagrarse presidente.
El economista, de 53 años, líder de La Libertad Avanza (LLA), ofreció también su colaboración al expresidente Macri para que Boca recupere "grandeza y brillo" como en su pasada gestión, asociada al ciclo deportivo ganador que lideró Carlos Bianchi.
Macri fue presidente de Boca entre 1995-2007, lapso en el que el club ganó 17 títulos, entre ellos, cuatro Copas Libertadores (2000, 2001, 2003 y 2007) y dos Copas Intercontinentales (2000 y 2003).