La víctima, quien está postrada en una silla de ruedas debido a la amputación de una pierna, sostiene que su hijo lo empuja y en ocasiones lo golpea con trompadas. Esta no es la primera vez que el jubilado enfrenta esta situación; ya había presentado una denuncia similar en 2020, lo que llevó a que la Justicia impusiera un cese de las agresiones en aquel momento.
El jubilado vive en un departamento del barrio 960 Viviendas junto a su pareja y su hijo, con quien afirma tener "problemas desde hace tiempo". La reciente denuncia fue motivada por la esperanza de que la Justicia imponga nuevamente una restricción de acercamiento o alguna medida que ponga fin a las agresiones que sufre en su propio hogar.