Polémica por medallas de oro: la Legislatura de San Luis gastó millones en reconocimientos de lujo

La reciente decisión de la Legislatura de San Luis de entregar medallas de oro a los diputados que finalizan su mandato generó fuertes críticas al detectarse que el gasto total superó los 100 millones de pesos. Muchos ciudadanos y sectores sociales cuestionan el contraste entre ese desembolso y el contexto económico actual, con aumentos, inflación y recortes en áreas sensibles.
Las piezas entregadas —medallas de oro macizo— tuvieron un costo elevado individualmente, lo que encareció considerablemente el acto protocolar de despedida. Esa inversión, destinada a quienes dejan su banca, fue interpretada por opositores y por parte de la ciudadanía como un gesto de lujo innecesario, sobre todo en un momento de ajuste presupuestario. (csmillennials.com)
El malestar ganó fuerza cuando se advirtió que mientras se justifican limitaciones en recursos públicos para servicios básicos o salarios, se destinan cantidades millonarias a símbolos de poder. Este contraste abrió un debate profundo: ¿cuál debe ser el equilibrio entre tradición parlamentaria y responsabilidad en el uso del dinero público?
Para muchos, el caso expone una desconexión entre la clase política y la realidad de amplios sectores de la población. Las medallas, más allá de su valor simbólico, representan un gasto que podría haberse destinado a áreas sensibles como salud, educación o infraestructura social.
La polémica no termina con el acto de entrega: la discusión se orienta ahora a la necesidad de transparencia, austeridad real y un uso responsable de los fondos públicos —especialmente cuando quienes gobernaron insisten en reformas económicas que afectan a ciudadanos comunes.



