“Femicidio en Villa Mercedes: denuncian un patrón de control y vigilancia”

En el comienzo del juicio por el femicidio de Anahí, su madre brindó un testimonio contundente en el que afirmó que la ex pareja de la joven mantenía un comportamiento obsesivo y controlador. Según relató, el acusado seguía a su hija, la vigilaba y manipulaba su entorno para intimidarla.
La mujer aseguró que, con el tiempo, empezaron a notar hechos “extraños” que afectaban la vida cotidiana de la adolescente: la desaparición de su gato, daños en el vehículo y el corte del servicio de internet. Para ella, estas situaciones no fueron accidentes ni casualidades, sino parte de un hostigamiento que se fue intensificando.
De acuerdo con la acusación, el crimen ocurrió el 23 de mayo del año pasado, entre las 6:30 y las 6:59, cuando Anahí dormía en su casa de Villa Mercedes. El agresor habría ingresado a la vivienda sin ser percibido y la atacó con un arma blanca, provocándole múltiples heridas, dos de ellas mortales.
La fiscalía sostiene que se trató de un femicidio agravado y solicitó la pena de prisión perpetua para el imputado. Durante la audiencia, la madre de la víctima se mantuvo firme al describir el contexto de control y persecución que vivía su hija antes del ataque.
El juicio continuará en los próximos días con nuevas declaraciones y la presentación de pruebas.



