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El consumo en supermercados volvió a caer en noviembre: ¿Cómo afecta a San Luis?

A pesar de la desaceleración de la inflación, el consumo en supermercados y autoservicios mostró un desplome del 20% en noviembre de 2024 respecto al mismo mes del año anterior. Así lo indica el informe mensual de la consultora Scentia, que además revela una caída del 0,4% en comparación con octubre. Este comportamiento refleja una tendencia que se mantiene desde el segundo semestre, con bajas interanuales de dos dígitos desde abril, y que acumuló un descenso significativo a lo largo del año.

El derrumbe fue mayor en comercios de barrio (autoservicios), donde la caída alcanzó el 22,6%, mientras que en grandes supermercados fue del 17,4%. Todas las categorías de consumo mostraron descensos:

  • Bebidas sin alcohol: -29,2%.
  • Impulsivos (snacks, golosinas): -28,7%.
  • Higiene y cosmética: -24,7%.
  • Bebidas con alcohol: -20,9%.
  • Limpieza del hogar y ropa: -19,1%.
  • Desayuno y merienda: -16,9%.
  • Alimentación: -14%.
  • Perecederos: -13,1%.

Según Osvaldo del Río, titular de Scentia, el comportamiento negativo se observa tanto en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) como en el interior del país. Además, el precio promedio ponderado de los productos acumula un incremento del 116% anual, alineado con el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El contexto económico y el impacto en San Luis
El desplome del consumo se vincula directamente con la pérdida del poder adquisitivo y la falta de recuperación del salario real, en un año marcado por la recesión económica y el impacto de medidas de ajuste implementadas por el gobierno nacional. Este panorama genera incertidumbre respecto al comportamiento del consumo en diciembre, cuando se espera que los efectos de la devaluación y la liberación de precios implementados a fines de 2023 impacten aún más.

En San Luis, donde gran parte de la población depende de salarios y consumo local para sostener la economía, esta baja afecta directamente a los pequeños comerciantes y a las familias. Los autoservicios y almacenes de barrio, que registran caídas más pronunciadas, son fundamentales en las economías barriales. La falta de estímulos al consumo y el ajuste del poder adquisitivo golpean particularmente a los sectores más vulnerables, incrementando la incertidumbre económica en la provincia.

El desafío será encontrar formas de mitigar estos efectos a nivel local, buscando medidas que incentiven el consumo y protejan a los pequeños comerciantes, pilares de la economía sanluiseña.

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