San Luis

“Intentamos frenarlo y no pudimos”: Salimón criticó el recorte en educación y ciencia

El recorte presupuestario aplicado al sector educativo y científico provocó una fuerte reacción en el ámbito político y académico de San Luis, con declaraciones contundentes del legislador Salimón, quien aseguró que se intentó frenar la modificación en el Presupuesto 2026 pero no fue posible impedirla. Según el dirigente, la eliminación o reducción de partidas destinadas a educación y ciencia representa un retroceso en políticas públicas clave para el desarrollo social y productivo.

Salimón sostuvo que tanto él como otros sectores plantearon objeciones durante el debate legislativo, advirtiendo sobre las consecuencias que estos ajustes tendrían para universidades, institutos de investigación, programas de becas y proyectos científicos. “Intentamos frenarlo y no pudimos”, expresó, en alusión a los esfuerzos realizados para preservar la asignación de recursos fundamentales y garantizar la continuidad de actividades que consideran estratégicas para el futuro del país.

El legislador afirmó que estos recortes impactarán negativamente en la calidad educativa, la formación de recursos humanos y la producción de conocimiento científico, ámbitos que, según su análisis, ya enfrentan desafíos estructurales y demandan sostenibilidad presupuestaria. Para Salimón, la decisión de recortar partidas en estos rubros contradice la necesidad de fortalecer capacidades locales y responder a las demandas de una sociedad que reclama más inversión en educación y ciencia.

La crítica se sumó a la de otros referentes del sector académico y gremial que también advirtieron los efectos adversos del ajuste. Desde universidades y asociaciones de investigadores señalaron que la reducción de fondos complicará la planificación de proyectos de mediano y largo plazo, afectará la realización de investigaciones y generará incertidumbre entre docentes, estudiantes y científicos, quienes dependen de financiamiento estable para sus actividades.

Salimón insistió en que la comunidad educativa y científica debe ser escuchada y que el recorte presupuestario no solo representa un número en una planilla, sino decisiones que repercuten en el futuro de miles de personas y en la capacidad del país para generar conocimiento y competitividad. Asimismo, reclamó mayor diálogo y participación de los sectores afectados en la discusión de políticas públicas que los involucran directamente.

El debate por el Presupuesto 2026 y sus implicancias en educación y ciencia continúa siendo un tema de fuerte discusión pública, con distintos actores planteando la necesidad de revalorizar estas áreas como pilares para el desarrollo equitativo y sostenible.

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