Sin recursos ni asistencia: ocultó la muerte de su suegra por un año
En un hecho que ha sacudido a toda la provincia de San Luis, un hombre confesó haber enterrado a su suegra en el patio de su casa en Santa Rosa del Conlara. El motivo: no tenía recursos para costear los gastos del sepelio ni de la cremación que la mujer había solicitado en vida. La insólita y macabra situación fue descubierta tras un trámite en el Registro Civil, cuando el protagonista, Jorge Gaguini, intentó obtener un certificado de defunción.
El cuerpo pertenecía a Blanca Provenza, una jubilada de 90 años que, según el testimonio de Gaguini, falleció por causas naturales, producto de la vejez. En lugar de acudir a una institución de salud o a una funeraria, la envolvió “como una momia” y la enterró en un pozo de dos metros de profundidad que él mismo cavó en el patio de su vivienda. Durante todo un año mantuvo el secreto, mientras continuaba cobrando la jubilación de la mujer.
Gaguini, que no fue detenido por el momento, explicó que tomaron esa decisión porque PAMI solo reintegraba $15.000, monto insuficiente para un servicio fúnebre. “No sabíamos para dónde correr”, dijo a los medios. También relató que su esposa, hija de la fallecida, es casi discapacitada, y que él se encargaba del cuidado de ambas mujeres en condiciones muy precarias. “La vieja tenía demencia senil, había que lavarla, cambiarla, limpiarla… La atendí hasta el último momento”, afirmó.
La investigación quedó en manos del fiscal Marcelo Saldaño, quien deberá esclarecer si hubo delito y determinar la responsabilidad de los involucrados, tanto por ocultar la muerte como por continuar percibiendo los haberes previsionales de la víctima.
El caso expone la cruda realidad de muchas familias argentinas que, ante la falta de recursos y un sistema de salud colapsado, toman decisiones desesperadas. “Fue un error no haber pedido ayuda”, dijo el hombre, aunque su declaración no alcanzó para borrar el horror de una situación tan extrema como reveladora.
