Milei reduce la edad para portar armas y facilita la importación con costos reducidos
En el marco de su plan para facilitar el acceso de los ciudadanos a las armas de fuego, el gobierno de Javier Milei ha implementado nuevas medidas que han generado polémica. Entre ellas, se destaca la reducción de la edad mínima para portar armas de 21 a 18 años y la introducción de un arancel diferenciado para la importación temporal de armas y municiones, destinado a certámenes internacionales de tiro.
Nuevas regulaciones y justificación oficial
A través del Decreto 1081/2024, publicado en el Boletín Oficial, se modificó el artículo 55 de la Ley Nacional de Armas y Explosivos, permitiendo que los ciudadanos de 18 años puedan adquirir, portar y utilizar armas de uso civil. Según el Gobierno, esta decisión busca «armonizar» las normativas con el resto del Código Civil y Comercial, que establece la mayoría de edad a los 18.
En paralelo, mediante la Resolución 173/2024, también publicada en el Boletín Oficial, se aprobó la exención parcial de aranceles para el ingreso temporal de armamento y municiones. Esta medida, promovida por la Agencia Nacional de Materiales Controlados (Anmac), tiene como objetivo facilitar la organización de competencias deportivas internacionales y fomentar el turismo relacionado. “Resulta necesario redefinir y actualizar las exigencias en los actos que supongan la introducción temporaria de armas de fuego para su uso en certámenes deportivos”, argumentó la Anmac.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, celebró la reducción de la edad para portar armas como un paso “histórico” y cuestionó a quienes critican esta medida. “A los 16 años tienen derecho a votar, y a los 18 pueden ir a la guerra o formar una familia. Entonces, ¿por qué no podrían portar un arma a esa edad?”, declaró.
No obstante, la decisión ha generado críticas desde diversos sectores que consideran que la facilitación del acceso a las armas podría incrementar los riesgos de violencia armada en el país. Organismos de derechos humanos y expertos en seguridad han advertido sobre las posibles consecuencias negativas de estas políticas.
Estas iniciativas coinciden con la creciente influencia de figuras del movimiento libertario que promueven el uso de armas. Tanto el principal asesor presidencial, Santiago Caputo, como el influencer Daniel Parisini (alias «El Gordo Dan»), son practicantes de tiro deportivo y han impulsado la narrativa del “autodefensa armada”.
Por su parte, el instructor de tiro de estas figuras, Sebastián Flores, destacó la importancia de la capacitación. “Yo exijo lo mismo a todos: si vienen por la búsqueda de portación o no, deben capacitarse”, afirmó en declaraciones radiales.
Con estas medidas, el Gobierno de Milei busca posicionarse como defensor de las libertades individuales, en línea con su ideología libertaria. Sin embargo, el debate sobre el impacto social y de seguridad que estas decisiones podrían generar sigue abierto, polarizando a la opinión pública y a los actores políticos en Argentina.
Autor : EL DESTAPE
