Vendedores ambulantes buscan un acuerdo para trabajar en diciembre sin conflictos
Un grupo de manteros mantuvo gestiones con autoridades municipales con la intención de formalizar su trabajo de cara a diciembre y evitar posibles conflictos. Reclaman un espacio regulado donde puedan vender, sin interferir con el comercio formal ni alterar el tránsito peatonal, y aspiran a que se les permita trabajar bajo condiciones dignas durante las fiestas de fin de año.
La intención es llegar a un acuerdo que contemple una relocalización ordenada: los vendedores proponen habilitar puntos específicos, bajo supervisión municipal, que les garanticen seguridad, permisos, y un marco normativo claro. Su objetivo es trabajar sin sobresaltos, evitando decomisos o desalojos que históricamente generan tensión.
Para ellos, la regularización es fundamental: muchos dependen de este ingreso para su sustento, sobre todo en una época del año donde los gastos suelen aumentar. Además, destacan que su actividad no debería confrontar con los comercios convencionales si se organiza de forma planificada, con espacios adecuados y control oficial.
Desde el sector ambulante se plantea la necesidad de diálogo, reglas claras y colaboración con el municipio. Creen que con buena voluntad se puede encontrar una solución que permita a todos —vendedores, comerciantes establecidos y vecinos— convivir sin conflicto, aprovechando la demanda de fin de año sin saturar las calles ni el centro comercial.
El momento es clave: diciembre se acerca, y con él el movimiento habitual de compras, ferias y ventas que impulsan tanto a la economía formal como informal. Los manteros esperan una respuesta favorable, con regulación y acompañamiento, para poder trabajar con tranquilidad.
