Tensión y abucheos: Victoria Villarruel fue repudiada tras la misa en homenaje al Papa Francisco
La misa en homenaje al Papa Francisco, celebrada el lunes 21 de abril de 2025 en la Basílica de San José de Flores, se vio empañada por un momento de tensión cuando la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, fue abucheada e insultada por un grupo de personas al retirarse del templo.
Un homenaje marcado por la polémica
La ceremonia, encabezada por el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, reunió a numerosos fieles y figuras políticas de distintos sectores para despedir al pontífice argentino, fallecido a los 88 años. Villarruel ingresó al templo sin inconvenientes y expresó su intención de «acompañar a los católicos y al pueblo argentino en el dolor por la pérdida de nuestro Santo Padre»
Sin embargo, al salir de la basílica, la vicepresidenta fue recibida con abucheos, insultos y cánticos por parte de decenas de personas que se encontraban en las escalinatas. Entre los gritos se escuchó: «Olé olé, olé olá, como a los nazis les va a pasar, a donde vayan los iremos a buscar», una consigna históricamente utilizada por organismos de derechos humanos en Argentina.
Reacciones y contexto
La presencia de Villarruel en el homenaje generó controversia debido a su postura en relación con los juicios por crímenes de lesa humanidad y su cercanía con figuras vinculadas al terrorismo de Estado. Mientras que otros asistentes, como el legislador Leandro Santoro y la diputada María Eugenia Vidal, no enfrentaron reacciones similares, el repudio hacia la vicepresidenta evidenció las divisiones profundas en la sociedad argentina.
El incidente refleja la tensión social latente y la politización de eventos que, en principio, buscan la unidad y el homenaje. La figura del Papa Francisco, si bien venerada por muchos, también ha sido objeto de críticas por su supuesta inclinación política, lo que añade complejidad al panorama.
La misa en honor al Papa Francisco, lejos de ser un evento de unidad nacional, puso de manifiesto las fracturas existentes en la sociedad argentina. El repudio a Victoria Villarruel no solo refleja el rechazo a su figura política, sino también la dificultad de separar los homenajes religiosos de las tensiones políticas actuales.
