Denuncian que una clínica privada cobra por tratamientos realizados en hospitales públicos

Una clínica privada de la ciudad de San Luis está en el centro de una fuerte polémica tras comprobarse que facturaba a obras sociales y prepagas servicios que, en realidad, se habían realizado en los centros de salud públicos. Vecinos, pacientes y referentes sanitarios expresaron su indignación al enterarse de que tratamientos, procedimientos y atenciones que se brindaron en hospitales estatales aparecen como si hubieran sido ejecutados en la clínica, lo que generó cargos a terceros pagos por prestaciones que nunca se hicieron allí.
La denuncia surgió cuando varios pacientes, al revisar sus estados de cuenta, observaron cargos por prácticas que no habían recibido en la clínica sino en efectores estatales. Ante la consulta, las autoridades del establecimiento privado sostuvieron que se trataba de “un error administrativo”, pero los reclamantes aseguran que la situación es sistemática y no un caso aislado.
Según quienes hicieron la denuncia, la clínica habría generado facturación a obras sociales y empresas de medicina prepaga por atenciones que fueron completamente brindadas por el sistema público, trasladando los costos a terceros y, a su vez, lucrando con prestaciones que en realidad no ejecutó. La situación pone en discusión las prácticas administrativas y éticas del sector, así como el control que deberían tener las entidades de salud y los organismos de supervisión.
Vecinos afectados adelantaron que presentarán reclamos formales ante las autoridades competentes para que se investigue a fondo y se determinen responsabilidades. También pidieron que se auditen las facturaciones emitidas por ese centro privado, con el objetivo de identificar si existen irregularidades similares que hayan afectado a otros afiliados de obras sociales y prepagas.
La polémica generó debate en la comunidad sobre la necesidad de mayor transparencia en las prácticas de facturación en salud, y de mecanismos más estrictos de control que impidan que se repitan situaciones que pueden perjudicar a los pacientes y al sistema sanitario en general.



